Aprendiendo desde Etiopía: preparados para la siguiente pandemia
“¿Y si es porque en África realmente lo han hecho mejor?”
Os quiero invitar a cambiar la mirada y enfocar Etiopía no solo como país receptor de ayudas sino como país del que aprender.
Os invito a mirar a África, no solo para hablar de hambruna, miseria, pobreza… sino también para aprender mutuamente y compartir experiencias en el manejo de epidemias, pandemias y políticas sanitarias…
Por su experiencia, tanto Etiopía como otros países del continente africano se han convertido en grandes maestros en el manejo de epidemias, sus habitantes no es la primera vez que se encuentran ante una, ni ante un sistema colapsado que deben readaptar para la nueva situación o montar hospitales de campaña rápidamente. Han demostrado capacidad de actuación de manera coordinada y rápida, cerrando fronteras, creación de equipos de trabajo de urgencia y alianzas, adquisición de recursos, implantación de mecanismos de vigilancia, campañas de sensibilización llegando hasta los lugares más remotos, habilitación de puntos de lavado y kits de higiene, creación de equipos multidisciplinares, suministros médicos y esfuerzo en reforzar el sistema de salud para evitar el colapso sin dejar de atender los servicios esenciales.
Os invito a mirar a África, no solo para hablar de hambruna, miseria, pobreza… sino también para aprender mutuamente y compartir experiencias en el manejo de epidemias, pandemias y políticas sanitarias… pero no como la excepción, tampoco para romper estereotipos, sino quizá como la nueva normalidad.
Iñaki Alegría Coll
Me pregunto lo que nos estamos preguntando todos, ¿por qué los contagios y la mortalidad por la COVID-19 en el continente africano son tan bajos? Desde Etiopía, más allá de las especulaciones, cuento lo vivido.
Después de apoyar el Millenium COVID19 Center, el hospital de campaña con mil camas ubicado en la capital etíope, coordinado con el apoyo del Saint Paul’s Hospital y el liderazgo del joven etíope y entusiasta Dr. Ishmael, me quedo impresionado.
Entro por una de las cinco puertas, cada una de ellas se encuentra bien rotulada: la primera para la entrada de los profesionales, otra para pacientes, que se encuentra separada de la de familiares y otra para pacientes recuperados, dejando la última para las ambulancias con casos positivos en una zona completamente aislada, a la que no puede acceder nadie desde fuera del recinto.
Un poco d humildad
Mi primer artículo
Deseo q te guste