Categorías
África

Senegal – Mballocounda

Cartel de YouTube

Mballocounda, un pequeño poblado de humildes cabañas de adobe y paja, al que se accede a través de un pequeño sendero cuya estrechez impide el paso de coches, permitiendo tan solo el acceso a pie, en bicicleta o los más afortunados en moto, y en la estación húmeda las abundantes tormentas tropicales obligan a ir a pie o a pie. A la llegada, el pueblo entero de da la bienvenida al ritmo de cantos y bailes, desde las mujeres más mayores a los niños más pequeños. Al momento percibí que el verbo dar toma su máxima expresión. Dejan todo lo que en ese momento estuviesen haciendo, nada hay más importante; llegan de muy lejos unos huéspedes y es necesario acogerlos. Lo importante son los otros, no uno mismo. Aquí, en cambio, si alguien llega a nuestra casa por sorpresa, lo primero que le diríamos sería porqué no nos ha avisado; que ahora no me va bien, estoy haciendo una cosa… ¿Quién es aquí el importante? Uno mismo, y es el otro el que debe adaptarse a nosotros.

En un contexto de pobreza, extrema en muchas ocasiones, Senegal continua siendo un país de sonrisas y alegrías enmarcadas en la “teranga”; palabra wolof, uno de los idiomas oficiales del Senegal, que se traduciría como “hospitalidad” o “calidez”, y es posiblemente el concepto que mejor define a los senegaleses. Cuando partes de África, en realidad no partes. Una vez has llegado a África, el alma queda seducida por la riqueza y pureza espiritual de este continente.

Por Iñaki Alegria

Médico Pediatra. Fundador de la ONG Alegría Sin Fronteras que desarrolla proyectos de desarrollo integral en Senegal y Etiopía.

Misión y Valores:
Promover el empoderamiento, liderazgo comunitario, equidad de género en los países más desfavorecidos con el objetivo de permitir la mejora de la calidad de vida de la población.

Empatía, compromiso, constancia, Amor, solidaridad, empoderamiento, equidad, humildad, transparencia y Alegría.

Deja un comentarioCancelar respuesta